Las placas de acero laminado en caliente son valoradas por su maleabilidad y costo-efectividad, lo que las hace ideales para estructuras portantes y bases de maquinaria. Las placas de acero al carbono, como el 1020 o el 1045, ofrecen una mayor resistencia a la tracción para componentes soportadores de carga, como engranajes y ejes. Las placas Corten destacan en entornos al aire libre gracias a su capa protectora resistente a la corrosión, mientras que las placas con textura de diamante mejoran la seguridad en pasarelas y escaleras. Para ambientes de alta temperatura, las placas de la clase A516 garantizan fiabilidad en calderas y recipientes a presión. Las placas perforadas ofrecen versatilidad en sistemas de filtración o diseños arquitectónicos. Comprender estas diferencias ayuda a evitar una sobrediseño o un mal desempeño. Centrarse en factores como la exposición ambiental, los requisitos de carga y los métodos de fabricación. Los proveedores de confianza ofrecen materiales certificados (por ejemplo, ASTM A36) y orientación técnica para alinear tu elección con los objetivos del proyecto.